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1.- Compartir vídeo en Internet

Presta atención

Las redes sociales se han convertido en las plataformas por excelencia donde los usuarios consumen vídeo. Esto se debe a la aparición de redes 4G de alta velocidad, lo que supone conexiones de descarga rápidas, y a que las publicaciones que incluyen vídeo generan hasta un 90% más de interacciones (me gusta, comentarios, etc).

El vídeo se ha convertido en el recurso con más fuerza para comunicar algo. Por poner algunos ejemplos, en Facebook se ven 100 millones de horas de vídeo al día, y YouTube recibe más de 4 millones de visitas diarias. Incluir vídeo en tus publicaciones en redes sociales incrementa el alcance de éstas, garantiza más interacciones y, en el caso de las empresas, se estima que el videomarketing aumenta el porcentaje de compra en un 64%.

La principal razón por la que se consume tanto vídeo desde dispositivos móviles, especialmente en redes sociales, es porque los vídeos tienden a ser cortos. Esto hace de la experiencia de consumir vídeo algo más personal que, por ejemplo, la televisión, y con menor nivel de distracciones por su corta duración. En definitiva, el vídeo en el móvil genera más emociones.

Actualmente, las principales fuentes de consumo de vídeo en Internet son YouTube y Vimeo (como plataformas especializadas en contenidos de vídeo), así como las redes sociales, como Instagram y Facebook, en las que cada vez pasamos más tiempo y cuyo contenido es cada vez más visual.

A continuación puedes ver un resumen de cada una de estas plataformas en cuanto a las características de los videos que se publican:

En conclusión:

Como se desprende de la tabla anterior, las plataformas de video como YouTube o Vimeo se utilizan para publicar videos de alta calidad, y cuya duración puede ser mayor. En cambio, en redes sociales los videos son muy cortitos y pesan menos, buscando esa inmediatez  de poder consumirse de forma rápida desde dispositivos móviles.