El vídeo se ha convertido en el recurso con más fuerza para comunicar algo. Por poner algunos ejemplos, en Facebook se ven 100 millones de horas de vídeo al día, y YouTube recibe más de 4 millones de visitas diarias. Incluir vídeo en tus publicaciones en redes sociales incrementa el alcance de éstas, garantiza más interacciones y, en el caso de las empresas, se estima que el videomarketing aumenta el porcentaje de compra en un 64%.
La principal razón por la que se consume tanto vídeo desde dispositivos móviles, especialmente en redes sociales, es porque los vídeos tienden a ser cortos. Esto hace de la experiencia de consumir vídeo algo más personal que, por ejemplo, la televisión, y con menor nivel de distracciones por su corta duración. En definitiva, el vídeo en el móvil genera más emociones.
Actualmente, las principales fuentes de consumo de vídeo en Internet son YouTube y Vimeo (como plataformas especializadas en contenidos de vídeo), así como las redes sociales, como Instagram y Facebook, en las que cada vez pasamos más tiempo y cuyo contenido es cada vez más visual.
A continuación puedes ver un resumen de cada una de estas plataformas en cuanto a las características de los videos que se publican: